«Por razones absolutamente incomprensibles, en los aeropuertos europeos, y en los españoles de forma muy particular, ni existe límite alguno a la arbitrariedad ni al pequeño pero insoportable abuso, ni se conoce el marco legal que debería encuadrar y limitar las medidas de seguridad que se nos aplican. Y los ciudadanos, con una especie de cristiana resignación, lo aceptan prácticamente todo con tal de no perder el avión. Como si en cuanto nos acercamos a la zona de control ya no rigiera el estado de derecho, sólo el imperio de las órdenes de unos agentes uniformados sin otro fundamento ni otra base que su propia autoridad.»
– Ignasi Guardans, eurodiputado por CiU, escribe una columna en Público
(Las negritas las he puesto yo).
Ya hemos hablado de Guardans por aquí, de aeropuertos hablamos a menudo, y también conocemos el teatro de seguridad. Todo ello se ha comentado en el marco de desarrollo de la sociedad de control.
Pues todo eso, y por supuesto la columna completa de Ignasi Guardans en Público, son lecturas recomendadas.